La LSSI establece la normativa y protocolos a seguir en los portales de internet, bien sean comercios electrónicos o de prestación de servicios. Esta ley orienta a las empresas en su cumplimiento, las condiciones de las comunicaciones comerciales y la privacidad de los usuarios.

Con la aplicación del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) de mayo de 2018, empresas de todos los sectores comenzaron a adaptar sus negocios a la nueva normativa. Consecuentemente, protocolos de protección de datos quedaban adaptados a las nuevas directrices, las cuales no habían sido modificadas desde la publicación de la LOPD.

De forma complementaria a este proceso, surgió la advertencia hacia todas las empresas que ofrecen sus productos y servicios vía web de la necesidad de adaptación de sus páginas para el cumplimiento de la LSSI.

¿Qué es la LSSI?

Para aquellos que no la conozcan, la LSSI (Ley 34/2002 de 11 de julio de Servicios de la Sociedad de la Información y de Comercio Electrónico) regula determinados aspectos jurídicos de los Servicios de la Sociedad de la Información. En particular, regula los relativos al comercio electrónico y los servicios ofrecidos en las plataformas web.

Pero… ¿a qué me obliga exactamente la LSSI?

La directiva principal se centra en informar al usuario lo antes posible de los intermediarios de servicios de la sociedad de la información que se emplean en nuestra web. Algunos de ellos los conforman las redes sociales, motores de búsqueda, webs que enlazan ofertas, servicios de seguimiento (Google Analytics), etc.

Los usuarios deben conocer cuales son, su régimen de responsabilidad y qué mecanismos hay para comunicarse con ellos. De esta forma podrán conocer los contenidos que alojan, transmiten o clasifican y la información que recopilan.

Entre los métodos que disponen las empresas para llevar a cabo dicho cumplimiento están las barras de privacidad. Estas barras aparecen en la parte inferior de la web e informan al usuario de las condiciones de uso y privacidad.

El usuario dispone de acceso a una sección donde se encuentra toda la información que debe conocer: política de privacidad, plataformas de seguimiento, redes sociales utilizadas, etc.

En caso de comunicaciones comerciales y recopilación de datos de usuario deberemos disponer de una página de aviso legal. Cualquier tipo de formulario (contacto, registro, etc.) será considerado un recopilador de información personal.

Esta página proporcionará al usuario toda la información relevante a nivel jurídico de la empresa dueña de la página web, así como la información relativa a:

• la propiedad intelectual
• contenido & uso
• finalidades de la web
• políticas de acceso por parte de menores e edad
• condiciones de cesión de datos a terceros
• política de enlaces,
• confidencialidad y protección de datos
• derechos de acceso, rectificación, cancelación u oposición a los datos almacenados del usuario.

Además, deberemos informar de las direcciones de correo electrónico o postal donde deberá dirigirse el usuario para cualquier labor relativa a sus datos almacenados.

¿Qué puede ocurrir si no adapto la web de mi empresa?

Como suele suceder, hasta que no se produce un primer caso en que el usuario demande sus datos, no nos daremos cuenta cuán importante es tener la web adaptada a la LSSI. Por tanto, es imprescindible que el usuario que intente contactar con nosotros encuentre la información de privacidad o legal en nuestra web.

En caso de que el usuario proceda a demandar a la empresa, las sanciones establecidas por el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital pueden oscilar de los 30.000€ a los 600.000€. Si tenemos en cuenta que la adaptación puede tener un coste que oscila entre los 240 y 500€, en este caso es mejor adaptarnos que esperar una posible sanción.

¿Cómo puedo adaptarla?

Si tu empresa tiene una consultora encargada de la adaptación a la RGPD, podrán ofrecerte el servicio de adaptación legal a la LSSI. Este servicio te proporcionará unos textos legales y una política adaptada a la situación de tu sitio web.

Sin embargo, deberás contratar a una empresa especializada en desarrollo web para implementar esos textos en tu página. Será necesario crear un par de secciones en tu web, unos accesos en el pie de página, en una barra de privacidad que emerja y permita al usuario aceptar la política, etc.

Desde Metainnova ofrecemos una solución única para la adaptación de tu página web a la LSSI. Nos encargamos de revisar al completo tu sitio para redactar los textos en base a la información que recopiles del usuario. Posteriormente, implementamos las barras de privacidad, dejando tu sitio plenamente adaptado en unas pocas horas.

Si quieres más información o adaptar ya tu sitio web, ponte en contacto con nosotros.